Si me decido marchar no me detengas.
Aunque al segundo de decirte adiós quisiera volver, el regreso sería peor.
Se por tus ojos lo que sufres y lo entiendo perfectamente.
Mis abrazos ya no sirven para curarte, y menos mis palabras que a veces te lastiman aún más.
Mis ojos tratan de decirte que no me sigas, no estoy lista para esto, si te quisiera te aseguro me quedaría a tu lado.
Para sanarte no me necesitas a mi, ni a este amor que es mas vacío de lo que imaginas.
Si te llamo no respondas.
Es mi egoísmo que hace que no pueda elegir si tenerte o dejarte ir.